Implantes dentales en Madrid Centro

El mantenimiento de los implantes dentales: clave para su efectividad

Cuando el dentista termina de colocar los implantes dentales en la boca, el proceso no acaba. Y es que, a partir de ese momento cuando pueden presentarse complicaciones que se podrán evitar si se siguen algunas recomendaciones y un correcto mantenimiento.

El primer paso será elegir un dentista de confianza, que haga un estudio exhaustivo y que tenga formación quirúrgica específica para realizar este tipo de intervenciones.

De acuerdo con Abdul Nasimi, «para que el implante dental sea efectivo no debería dar problemas en los años posteriores». Pero para que esto ocurra, no basta con que esté correctamente colocado. Uno de los problemas que pueden derivar tras la intervención es la periimplantitis, inflamación que afecta a los tejidos que rodean a un implante dental y que origina una pérdida del soporte óseo en el que se ha integrado.

Aunque este problema le puede surgir a cualquier persona, fumar aumenta el riesgo de perder un implante dental, ya que el tabaco suele alterar las barreras naturales contra las infecciones y daña las células epiteliales orales.

«La higiene es una de las partes fundamentales del mantenimiento», indica el Dr. Abdul Nasimi. Habrá que hacerlo de manera minuciosa, comenzando con el cepillado dental, seguido por la seda dental y finalizando con la irrigación. Esta última consiste la aplicación de forma directa de un chorro pulsátil de agua que facilita la eliminación de la placa dental.

Con este proceso conseguimos evitar la aparición de patologías periimplantarias haciendo que los implantes duren más tiempo en la boca. La irrigación es una excelente opción para cualquier persona que desee llevar a cabo una limpieza oral lo completa y efectiva.

Otra de las recomendaciones sería usar, sobre todo en el caso de los bruxistas, una férula de descarga que disipa las cargas transmitidas por las fuerzas de la mordida, con esta pieza de resina acrílica conseguiríamos no ejercer demasiada tensión sobre el implante.

Por último, visitar al dentista con regularidad para realizar revisiones nos ayudará a detectar y anticiparnos ante posibles complicaciones, en este sentido los profesionales valorarán el tejido que rodea la base del implante y comprobar el color y consistencia del implante. Por este motivo en el año posterior a la colocación del implante, las visitas de control serán cada tres o cuatro meses que una vez pasado ese año podrán ser de alrededor de seis meses.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*